Una mujer en estado de alicoramiento que conducía un vehículo por las calles del centro de Zipaquirá estuvo a punto de causar una tragedia.
La mujer se movilizaba por la calle octava en sentido oriente-occidente y al tomar la carrera décima perdió el control del automotor, el carro se subió al andén y chocó abruptamente contra un local comercial del sector.
De acuerdo al registro de las cámaras del sector, el incidente se produjo hacia las 4 y 46 de la tarde de este viernes 5 de junio.
La mujer de 46 años de edad no tuvo inconvenientes, y sin siquiera descender del vehículo, retrocedió y quiso evadir el control de las autoridades, hasta que fue interceptada momentos después, a una cuadra de la plaza central de la ciudad, cuando seguía conduciendo el estropeado vehículo en contravía por la carrera novena.
La mujer fue conducida a la Unidad Funcional del Hospital Universitario de la Samaritana para el examen de embriaguez, que resultó positivo con grado dos de alcoholemia.
La carrera décima, donde se produjo el choque, es una zona comercial de alta presencia de transeúntes, que por fortuna en ese momento presentaba baja circulación ciudadana porque estaba comenzando en Zipaquirá la medida de toque de queda (desde las 4pm).
A la conductora le fue impuesta la respectiva orden de comparendo y el vehículo fue inmovilizado y conducido a los patios.
La multa y los costos del siniestro pueden superar los dos millones de pesos, entre comparendo, grúa y patios, además de las afectaciones que sufrió el vehículo particular.
El mayor Willintong Arias, comandante del Distrito 9 de Policía, hizo una llamado a la responsabilidad y al cuidado de parte de los ciudadanos, puesto que en casos como este se suman varias circunstancias: el consumo de licor, la conducción en estado de embriaguez, el incumplimiento del toque de queda y la desatención de las recomendaciones para controlar el avance del coronavirus.
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