El extraño ausentismo
Se registró una proposición para iniciar el trámite de moción de censura al Secretario de Obras de la Alcaldía.
Una particular escena se vivió este jueves 28 de julio en el Concejo de Zipaquirá al final del debate de control político al secretario de obras públicas del municipio Fernando Forero.
Curiosamente, en el preciso instante en que se ponía en consideración una propuesta para iniciar la moción de censura que tenía la pretensión de retirar al funcionario de su cargo, las curules de un grupo de honorables concejales quedaron por arte de magia con la silla vacía.
Aunque los concejales estuvieron sentados en la corporación a lo largo de la sesión, de un momento a otro se registró ante la presidencia del Concejo un inusitado e inusual «permiso para retirarse».
El Concejo de la ciudad se llenó de sillas vacías de un momento a otro.
Extrañamente las curules de un grupo de concejales de la coalición del gobierno de Wilson García se llenaron de la ausencia física de sus ocupantes, y de manera más sorprendente, fueron apareciendo en el registro del presidente Alfonso Obando, las solicitudes de permiso para retirarse del bello recinto, de siete cabildantes del grupo de gobierno.
Perdieron de esta manera los siete concejales del conveniente ausentismo, la histórica oportunidad de ejercer el deber para el que fueron elegidos: votar y tomar decisiones, y sobre todo, votar escuchando el clamor, el desespero y la indignación de los electores que les llevaron a ocupar esos lugares.
En la sesión se escucharon fuertes cuestionamientos a las obras viales del gobierno municipal, especialmente a tres contratos cuyo valor sumado supera los 18 mil millones de pesos, y que según lo que revelaron algunos concejales, presentan pobres ejecuciones, graves atrasos en los cronogramas de obra y unas inclementes afectaciones a las comunidades vecinas de estas fallidas inversiones.
Después de un debate de más de siete horas en el que el Concejo hizo el control político al secretario de obras públicas, la sesión terminó con la proposición de moción de censura negada, y con la notoria falta de quienes brillaron por su ausencia: Jhon Fulano, Anteno Triana, Luz Ángela Mora, Javier Pérez, Wilmar Cristancho, Rigoberto Cañón y Andrés Pinzón.
La proposición tuvo solamente el respaldo de seis concejales que la firmaron y tres que manifestaron su negativa a la misma, pero requería por lo menos nueve respaldos para iniciar su trámite en la Corporación. Esta vez no fue.
Tristemente, los zipaquireños fueron privados del honor de escuchar la elocuencia argumentativa de los ausentes, y su capacidad para tomar decisiones importantes para la ciudad.
El extraño ausentismo
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